Vida al aire libre

Acampar es lo más regocijado en la vida de un Scout. Viviendo al aire libre en medio de la naturaleza que Dios nos ha dado, en los cerros y entre los árboles, los pájaros, las bestias, el mar y los ríos - es decir, viviendo en contacto con la naturaleza, en una tienda de campaña por casa, guisando nuestros propios alimentos y explorando-, lo que trae aparejadas salud y felicidad, cosas que no se pueden obtener entre muros de tabique y el humo de las ciudades. Excursionar internándose cada vez más en el campo, explorando cada día nuevos lugares, constituye una aventura gloriosa. Además, con ello se adquiere tal fuerza y tal resistencia, que pronto ya no importan el aire ni la lluvia, ni el frío ni el calor. Todo se recibe como viene, con tal sensación de confianza que permite enfrentarse sonriente a toda dificultad, porque sabe que al fin ha de triunfar. Por supuesto, para poder gozar de un campamento y de una excursión, hay que saber hacerlo con propiedad. Hay que saber por uno mismo cómo levantar una tienda o una cabaña; cómo encender una fogata; cómo cocinar los propios alimentos; cómo amarrar troncos de qué manera de construir un puente o una balsa; cómo encontrar el camino durante la noche, lo mismo que durante el día, en un paraje desconocido; y otra multitud de cosas. Muy pocas personas aprenden estas cosas viviendo en lugares civilizados donde cuentan con una confortable casa y una cama muelle que dormir; donde sus alimentos les son preparados y cuando quieren encontrar su camino les basta recurrir a un policía. Pues bien, cuando estas personas tratan de hacer Escultismo o de explorar, se encuentran incapacitadas. Aún vuestro héroe en los deportes, si lo colocáis en la selva al lado de una persona adiestrada en campismo y que sepa cuidar de sí misma, sus marcas como bateador no le servirán allí de nada; no será sino un Pie Tierno. BADEN POWELL - ESCULTISMO PARA MUCHACHOS

"No vayas demasiado de prisa"

El cazar animales salvajes con una cámara es mejor deporte que matarlos con un rifle. Por una parte tienes que acercarte más a ellos, y esto significa un acecho más cuidadoso e inteligente, y por supuesto cuando estás tratando con animales peligrosos es un poco más espeluznante y emocionante. Hay dos clases de acechadores. El Europeo está generalmente más impaciente de obtener su pieza; acecha de prisa y consecuentemente; alarma a su animal antes de que pueda acercarse a cumplir su propósito. Un fotógrafo necesita docenas de intentos antes de obtener una buena fotografía. El cazador nativo, por otro lado, se arrastrará y se congelará parado o se acostará inmóvil durante horas, durante un día si es necesario, pero sigue y sigue. Su gran arma es la paciencia y con paciencia obtiene éxito. Como un pescador. Ves una figura encorvada, sentada en un bote hora tras hora, llueva o truene, o apoyado en manos y rodillas tirar una mosca a un pez sin ser visto por este. Bueno, es solo con paciencia infinita que esos tipos pescan. A veces el pescador la pasa mal cuando el viento o los arbustos enredan su línea y se enreda de modo desesperado. E1 hombre normal lo llenaría de improperios y trataría de desenredar la maraña con determinación solo para encontrar que se había anudado más que antes. Pero el verdadero pescador sabrá que la única manera de lograrlo es ponerse a trabajar lentamente y con cuidado para sacar los hilos enredados y separarlos aunque se tarde mucho, terminará con "todo arreglado". De nuevo es la "Paciencia" la que se lleva la palma. En algún lugar he escrito: "más carreras se han frustrado por falta de paciencia, que por la bebida o el crimen". He visto a muchas personas fracasar en su trabajo sólo porque se aburrieron de él y se disgustaron con el patrón, o se desilusionaron con los malos resultados de sus esfuerzos cuando, si hubieran silbado quedamente esa vieja canción "Espera hasta que las nubes pasen" y se forzaran a sí mismos a seguir trabajando, hubieran tenido éxito al final. Pero no, tiran todo por la borda y luego se sorprenden porque no progresan en la vida. Todo el mundo (y tú también), va a encontrarse con disgustos y contratiempos de vez en vez, pero te recuperarás si solo te pellizcas y dices "Paciencia". BADEN POWELL